Para muchas personas trabajar desde casa es una ventaja dentro de circunstancias normales, mientras que para muchos de nosotros los cuales nos encontramos trabajando de manera remota, la adaptación puede resultar muy difícil durante estos tiempos tan difíciles.
Pasar el día de trabajo sin ver a sus colegas y tener el beneficio de la colaboración en persona, puede hacer que se sienta aislado e inseguro a la adaptación a nuevas circunstancias.
¡Aquí hay algunas sugerencias sobre cómo manejar los desafíos únicos al trabajar de forma remota!
Mantenga una rutina lo más cercana posible a su tiempo en la oficina
Seleccione un espacio de trabajo tranquilo en su hogar, recuerda que el sofá o la cama pueden ser muy tentadores, pero no te ayudarán a sentirse productivo.
No todos tenemos el espacio en nuestro hogar designado para nuestra oficina, trata de encontrar un lugar donde puedas concentrarse y si es posible, evita los espacios compartidos como la sala de estar.
Al final del día, puede que te resulte difícil separar tu vida profesional de tu vida personal, si estás tratando de relajarte mientras estás sentado cerca de tu espacio de trabajo y tu computadora portátil para el trabajo está a tu alcance, ciérrala y guárdala al terminar tu jornada laboral.
Para muchas personas su viaje matutino a la oficina ayuda a cambiar a su rutina a "modo de trabajo". Sin embargo, esto puede resultarles difícil en la transición a su jornada laboral. Vestirse antes del trabajo todas las mañanas puede ayudar a facilitar esa transición cuando permanezca casa. Es difícil sentir que estás "en el trabajo" con tu bata de baño o pijama.
Programa descansos como lo harías en la oficina, ya sea para el almuerzo o para estirar las piernas.
Haga ejercicio regularmente y aliméntate con una dieta saludable
Es muy fácil tener tu refrigerador al alcance de tu mano para pasar el día comiendo bocadillos. Piensa antes de comer: si estuvieras en la oficina, ¿pasarías el día comiendo bocadillos? Una buena regla general es: si no lo comerías cuando estabas en la oficina, ¡no lo hagas ahora!
Mientras los gimnasios están cerrados, encuentra otras alternativas. Sal a caminar durante el almuerzo o después de tu horario de trabajo. Si prefieres permanecer en casa, YouTube y otros servicios de transmisión ofrecen una amplia variedad de entrenamientos que se pueden hacer en un espacio pequeño sin ningún equipo especial.
Limite las distracciones
Si bien en teoría, esta multitarea suena como ponerse al día con el DVR mientras trabaja, realmente esto no resulta funcional. Mientras que la música de fondo o incluso una aplicación de sonidos de la naturaleza pueden ayudarte a concentrarte, por lo cual la mejor idea es encender el televisor después de tu horario de trabajo.
Los entornos de oficina a menudo son más silenciosos que la mayoría de los hogares, al menos que vivas solo, es difícil concentrarse cuando tu familia se encuentra en casa. Los límites son importantes y es posible que debas dejar en claro a los miembros de su familia que trabajar desde casa, significa trabajar y seguir con tu rutina normal.
Comunícate con tus colegas cuando estés frustrado o en una situación difícil
No es un momento fácil cuando estás acostumbrado a poder comunicarte con tus colegas del cubículo de al lado, trabajar de forma remota puede hacerte sentir más aislado. Trata de recordar que todos están pasando por esta misma situación independientemente de la ubicación en la que cada uno se encuentra.
Tal vez tengas problemas para entender un tema que te gustaría discutir con un compañero de trabajo. Por eso estar en diferentes lugares no significa que no puedas colaborar con tus colegas: envía un correo electrónico, un mensaje instantáneo, un video chat o toma tu teléfono.
No olvides a los colegas que viven solos. Cuando salen de casa por alimentos esenciales como alimentos o medicinas y no pueden ver a sus familiares, amigos o compañeros de trabajo, su sensación de aislamiento puede ser aún más fuerte que la de la mayoría. Un mensaje rápido o una llamada telefónica hacia ellos puede significar más de lo tu usted crees.
Acepta que la tecnología con la que estás trabajando no es a lo que estás acostumbrado
Es posible que estés utilizando una computadora en casa que no sea tan rápida o eficiente como a la que está acostumbrado en el trabajo. Tal vez por la prisa y la transición de los trabajadores fuera de la oficina, te han pedido que utilices tu propio equipo. Tal vez la conexión remota no sea tan estable como lo quisieras, es frustrante, en circunstancias atenuantes debes hacer todo lo posible para trabajar dentro de esas limitaciones. concentrándote en lo que no tienes y solo te causará más estrés, lo cual no ayudará a resolver la situación.
Controla las cosas que tienes bajo control y deja ir las cosas que no te favorecen
El mundo se ha convertido en un lugar aterrador y el aluvión constante de noticias que contribuyen a su nivel de estrés. Cuando hay tantas cosas fuera de tu control, haz tu mejor esfuerzo para controlar las cosas dentro de tu poder. mantente informado, pero no te quedes pegado a las noticias.
La situación de tu oficina en casa puede que no sea perfecta, pero trata de hacerla lo más cómoda posible. Pueden ser cosas simples como usar tu taza de café favorita mientras trabajas o colocar un marco con tu imagen favorita en tu escritorio, un poco de normalidad pueda beneficiar tu día y ayudar a aliviar el estrés.
¡Usa tu tiempo como ventaja!
Es posible que haya más tiempo de inactividad en tu trabajo de lo que estás acostumbrado; podría ser un buen momento para comenzar algunos proyectos como hacer la "limpieza", que nunca parecemos tener el tiempo suficiente, cuando nos encontramos trabajando desde la oficina.
Siempre hay cosas que la gente pospone debido a otros proyectos más urgentes. Habla con tu gerente o colegas para obtener ideas, ¡quizás alguien está trabajando en proyecto a largo plazo y tú puedes le ayudar!
Mantente positivo
Recuerda que, aunque estamos pasando por momentos difíciles, estamos juntos en esto. ¡Ninguno de nosotros está solo y lo superaremos juntos!
